«Lo que más nos derrotará en nuestra recuperación es una actitud de indiferencia o intolerancia hacia principios espirituales.»

_Texto Básico, p. 21_

Al principio, cuando llegamos a NA, a muchos nos resultó muy difícil aceptar los principios espirituales sobre los que se basa este programa… y por buenas razones. Por mucho que hubiéramos tratado de controlar nuestra adicción, notábamos nuestra impotencia. Estábamos cada vez más frustrados y enojados con todos los que nos sugerían que había esperanza para nosotros, porque sabíamos más que nadie. Las ideas espirituales quizás tuvieran algún valor en la vida de los demás, pero en la nuestra, no.

A pesar de nuestra indiferencia o intolerancia hacia principios espirituales, Narcóticos Anónimos nos atrajo. Allí conocimos a otros adictos. Habían estado donde estábamos nosotros, impotentes y desesperados, y sin embargo habían encontrado una manera no sólo de dejar de consumir, sino también de vivir y gozar de la vida limpios. Hablaban de principios espirituales que les habían indicado el camino hacia esta nueva vida de recuperación. Para ellos, estos principios no eran sólo teorías sino parte de su experiencia práctica. Sí, teníamos una buena razón para ser escépticos, pero estos principios espirituales de los que hablaban otros miembros de NA parecían funcionar de verdad.

No necesariamente aceptamos todas las ideas espirituales que oímos una vez que admitimos esto, pero empezamos a pensar que si estos principios habían funcionado para otros, a lo mejor nos funcionarían también a nosotros. Para empezar, bastaba con esta buena voluntad.

*Sólo por hoy:*

A lo mejor los principios espirituales de los que oigo hablar en NA me funcionan.

Estoy dispuesto, al menos, a abrir mi mente a la posibilidad.

_(Del libro de las reflexiones diarias «Solo Por Hoy» Copyright © 1995, NA World Services, Inc. All Rights Reserved)_

Complementación

Lo que más nos derrotará en nuestra recuperación es una actitud de indiferencia o intolerancia hacia principios espirituales. Tres de éstos son indispensables: honestidad, receptividad y buena voluntad. Con ellos vamos por buen camino.

Creemos que nuestra forma de abordar la enfermedad de la adicción es totalmente realista, ya que el valor terapéutico de un adicto que ayuda a otro no tiene igual. Creemos que nuestro método es práctico, ya que el adicto es la persona que mejor puede comprender y ayudar a otro adicto. Creemos que cuanto antes 0encaremos nuestros problemas dentro de la sociedad, en nuestra vida diaria, tanto más rápidamente nos convertiremos en miembros aceptables, responsables y productivos de esta sociedad.

La única forma de no volver a la adicción activa es no tomar esa primera droga. Si eres como nosotros, sabrás que una es demasiado y mil no son suficientes. Ponemos mucho énfasis en esto, ya que sabemos que cuando consumimos drogas de cualquier tipo o sustituimos unas por otras, volvemos a caer en la adicción.

Pensar que el alcohol es diferente a otras drogas ha causado la recaída de muchos adictos. Antes de llegar a NA, muchos de nosotros considerábamos el alcohol como algo aparte. Sin embargo, no podemos darnos el lujo de estar confundidos: … el alcohol es una droga. Padecemos la enfermedad de la adicción y si queremos recuperarnos debemos abstenernos de todo tipo de drogas. He aquí algunas preguntas que nos hemos hecho: ¿Estamos seguros de que queremos dejar de consumir? ¿Comprendemos que no tenemos ningún control sobre las drogas?¿Admitimos que a la larga no éramos nosotros los que consumíamos las drogas sino que éstas nos consumían a nosotros?¿Fueron las cárceles y las instituciones las que se hicieron cargo de nuestra vida en diferentes ocasiones? ¿Aceptamos completamente el hecho de que todos los intentos de dejar de consumir o tratar de controlar nuestro consumo fallaron? ¿Somos conscientes de que nuestra adicción nos convirtió en un tipo de persona que no queríamos ser: deshonestos, tramposos, tercos, en contradicción con nosotros y los demás?¿Creemos realmente que hemos fracasado como consumidores de drogas?

Cuando consumíamos, la realidad se convirtió en algo tan doloroso que preferíamos refugiarnos en el olvido. Intentábamos evitar que los demás se dieran cuenta de nuestro sufrimiento. Nos aislamos en prisiones que habíamos construido con nuestra soledad. Fue esta desesperación lo que nos hizo buscar ayuda en Narcóticos Anónimos. Cuando llegamos a NA, estamos física, mental y espiritualmente destruidos. Hemos sufrido durante tanto tiempo que estamos dispuestos a hacer lo que haga falta para mantenernos limpios.

Texto Básico pag 21 y 22

Abrir chat
Hola
¿En qué podemos ayudarte?