Cuando salimos en busca de la vida con buena voluntad y receptividad, las cosas buenas tienden a aparecer solas.
_-Vivir limpios, Capítulo tres, «La espiritualidad es algo práctico»_
«Tengo una vida plena y enriquecedora en recuperación -compartió una compañera mientras los demás asentían-, Pero me enfrento a algunas decisiones sobre qué tengo que hacer a continuación. Estoy dispuesta a hacer lo correcto, si supiera lo que es. Las alternativas son todas buenas, pero ¿cómo averiguo cuál es la voluntad de Dios para mí? Después de la reunión, algunos miembros de NA con experiencia le comentaron sus puntos de vista sobre los Pasos Tercero y Undécimo.
«Me volvería loco si intentara saber, saber de verdad, si mis decisiones coinciden con la voluntad de mi Poder Superior -le comentó un miembro-. Me dijeron que si lo que buscaba era una señal clara como un relámpago, me iba a decepcionar». Cuando nos planteamos preguntas concretas sobre lo que está bien y lo que está mal: «¿robo este caramelo o tengo que pagarlo?», es evidente la respuesta acertada. Pero buscar una respuesta correcta a los dilemas multifacéticos de la vida puede paralizarnos. «Llegué a entender que el Tercer Paso depende por completo de mi decisión -continuó el compañero. Mi buena voluntad para trabajar el resto de los Pasos es esa decisión en acción. Mi trabajo consiste en estar presente, estar dispuesto y hacer el trabajo que tengo delante. Siempre y cuando esté conectado con los Pasos, puedo confiar en mi intuición».
«También solía rezar para conocer la voluntad de Dios para conmigo -confesó otra compañera-. Mi madrina señaló que el egocentrismo había distorsionado mi sentido del oído: el Undécimo Paso no tiene que ver conmigo, sino con nosotros». Y siguió explicando de qué manera centrarse en nosotros había ampliado su perspectiva. «Fue algo que cambió mi actitud e influyó en cómo rezo y medito. Me facilitó vivir de acuerdo con principios espirituales, escuchar mi corazón y confiar en que mis decisiones enriquecerían mi capacidad de prestar servicio». Ver la vida a través de un gran angular pone nuestras decisiones en un contexto más amplio, lleno de amor, apoyo y servicio. Si practicamos la buena voluntad y la toma de conciencia, hasta nuestros traspiés expanden nuestra capacidad de ser útiles a los demás.
Cuando estamos en buena forma espiritual, hacer lo que corresponde no tiene por qué ser complicado. Procuramos tener la buena voluntad de avanzar con fe, sabiendo que estaremos bien. A la gente le gusta decir «cuando se cierra una puerta, se abre otra». Ser miembros de NA nos permite equiparnos mejor para avanzar por un pasillo con muchas puertas: algunas no llevan a ninguna parte; otras, a mundos nuevos, y todas ellas nos preparan para servir.
—————————————————————
_*Hoy estoy dispuesto a que mi Poder Superior me guíe. Tomaré decisiones basadas en principios y actuaré positivamente con la certeza de que mi servicio mejorará.*_
_Copyright © 2024 by Narcotics Anonymous World Services, Inc. All Rights Reserved_
