Cuando nos damos cuenta de que podemos atender nuestras necesidades, empezamos a sentir que tenemos futuro.
_-Los principios que nos guían, Séptima Tradición, reflexión inicial_
La adicción activa era un circuito de dependencia sin salida: dependencia de la droga, de una forma de vida, de que esa persona nos dé algo de dinero por última vez para salir adelante. Recibíamos sin dar. Hablábamos sin escuchar. Hacíamos muchas promesas, pero cumplíamos muy pocas, por no decir ninguna. No veíamos ninguna salida ni futuro… hasta que logramos estar limpios y empezamos nuestro viaje para mantenernos a nosotros mismos en recuperación.
Cuando consideramos que el hecho de mantenernos a nosotros mismos es un principio espiritual de la Séptima Tradición, pensamos sobre todo en contribuir con dinero -o con tiempo- para asegurarnos de que el grupo pueda sobrevivir. Pero si un grupo de NA existe es porque está compuesto por miembros que practican en su propia vida el principio de mantenerse. En recuperación, aprendemos a invertir en nosotros y a atender nuestras necesidades. En vez de depender completamente de los demás, buscamos en nuestro interior para encontrar una fuente de fortaleza y recursos.
También asumimos la responsabilidad personal en situaciones en las cuales antes parecíamos incapaces de hacerlo. De hecho, contribuir con NA demuestra nuestra capacidad y buena voluntad de comprometernos con nuestro propio sostén. Invertimos en nosotros mismos a través de nuestra comunidad de recuperación cuando contribuimos para mantener las puertas abiertas para los que lleguen después. Este apoyo a los demás nos eleva y nos hace seguir adelante.
Mantenerse con los recursos propios no es algo que se practique a solas. Cuando hablamos de atender nuestras necesidades, no queremos decir que seamos autosuficientes, sino que nos ocupamos del sostén que necesitamos. Podemos recurrir a nuestros compañeros, a un padrino, a nuestro Poder Superior… todos ellos recursos propios. Nosotros también somos parte esencial de ese sistema. Gracias a que satisfacemos nuestras propias necesidades, los demás por fin pueden confiar en nosotros.
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_*Hoy, voy a dar y recibir para practicar el principio de mantenernos con los recursos propios. Si sigo este camino, conservaré la esperanza de un futuro que pensé que nunca tendría.*_
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