» Mantener una mente abierta y dispuesta a aprender sobre nuestros principios básicos permite que nuestra comprensión se profundice y madure. »
Principios rectores, Introducción, “En este libro”
Muchos de nosotros pasamos por una fase en la primera etapa de la recuperación en la que experimentamos lo que algunos llaman el «síndrome de Peter Pan». Al igual que el personaje de ficción que se niega a crecer, algunos de nosotros nos propusimos tener la infancia feliz que la adicción nos robó. Recuperar el tiempo perdido puede ser una respuesta natural a la nueva libertad de la que disfrutamos. La risa y la diversión que compartimos con otros miembros es una parte importante de lo que nos hace volver en cualquier etapa de la recuperación. Pero, como sucede con tantas cosas, podemos llevar el enfoque de Peter demasiado lejos, negándonos a actuar de manera responsable o a madurar en nuestra recuperación.
A medida que acumulamos edad y tiempo limpio, puede ser un shock darnos cuenta de que los nuevos miembros nos tienen en mente cuando se refieren a «nuestros predecesores». Un miembro compartió: «Me atengo a mi definición de ‘antiguo’ como cualquiera que esté limpio al menos cinco años más que yo. En algún momento, noté que encajaba en esa descripción para los demás y que me buscaban como mentor. Sentí la necesidad de saber más y hacerlo mejor, así que comencé un estudio de Tradiciones para ayudarme a estar a la altura de la etiqueta de predecesor».
También como Peter Pan, algunos de nosotros podemos resistirnos a la idea de madurar, o podemos rechazar la idea de buscar una comprensión más profunda de nuestros principios porque pensamos que suena, bueno, aburrido. Cualquiera de estas dos posturas puede ser una excusa para una mentalidad cerrada. De la misma manera, la frase «así es como siempre lo hemos hecho» no invita precisamente al debate ni permite la exploración de diferentes perspectivas.
Por otro lado, permanecer dispuestos a aprender y tener una mente abierta nos permite considerar diferentes perspectivas a través de la lectura, el debate y la contemplación. Con nuestras mentes abiertas a aprender más sobre nuestros principios rectores, a menudo encontramos nuevas aplicaciones en nuestras vidas dentro y fuera de NA, así como para nuestros grupos y en el servicio. Un miembro compartió: «Antes de entenderlas realmente, veía las Tradiciones como un conjunto rígido de reglas. No entendía que al protegernos de nuestros peores impulsos, crean las condiciones para la creatividad y la libertad en el servicio a NA».
——— ——— ——— ——— ———
Seguiré siendo una persona dispuesta a aprender y mantendré mi mente abierta a comprender nuestras Tradiciones a un nivel más profundo. A medida que madure en mi recuperación, consideraré mi responsabilidad de ser mentora de otros.