El perdón es una acción y una decisión. Tenemos una gran necesidad de perdón, pero también debemos practicarlo.
-Vivir limpios, Capítulo siete, «El amor»
Trabajar los Doce Pasos de NA nos enseña a tomar nuestras propias decisiones y a obrar en consecuencia en nuestra vida. Ya no dejamos que las circunstancias y nuestra enfermedad dicten cada uno de nuestros movimientos. Elegimos practicar el perdón y tratamos de no preocuparnos demasiado por si nuestros seres queridos nos perdonarán ni cuándo lo harán. (A fin de cuentas, a veces nos portábamos bastante mal.) Nos centramos en cuestiones que están bajo nuestro control y hacemos lo necesario para perdonarnos y perdonar a los demás.
El servicio a NA nos da muchas oportunidades de aplicar este principio espiritual. Cuando hacemos servicio con otros compañeros, es casi inevitable que de vez en cuando choquemos. La mayor parte de las veces conseguimos dejar de lado nuestros desacuerdos y nos unimos para apoyar al adicto que todavía sufre. Pero practicar la unidad no neutraliza la necesidad de perdón. «A pesar de actuar con espíritu de unidad, seguía guardando algún rencor —compartió una compañera—. Y se me ocurrió que el servicio sería más agradable si perdonaba a algunos miembros con quienes presto servicio».
Muchos nos hemos subido al estrado de NA para intervenir en defensa de lo que creíamos mejor para la Confraternidad. Así que podemos perdonar a los demás por ser tan apasionadamente irritantes porque también lo hemos sido nosotros. En lugar de conservar un registro de los peores momentos de cada uno, podemos tomar la decisión de centrarnos en el trabajo que hacen bien. Modificamos nuestro punto de vista para tener en cuenta la imagen completa.
Ninguno de nosotros es perfectamente bueno ni completamente malo. Si practicamos el perdón, nos permitimos y permitimos a los demás ser humanos. Claro que cometemos errores, pero nuestros peores momentos no tienen por qué definirnos. Al practicar el perdón, podemos cambiar nuestro enfoque y reconocer los puntos fuertes que cada uno aporta
Hoy elijo practicar el perdón. Reexaminaré algunos viejos resentimientos, tomaré medidas positivas sobre cuestiones sin resolver y me desprenderé de cualquier encono persistente. Aceptaré a los demás tal como son ahora.
(Copyright©2024, NA World Service, All Rights Reserved)